Un enfoque integral frente a la obesidad infantil y juvenil

Dra. Clotilde Vázquez y Dra. Teresa Montoya Álvarez
Dra. Clotilde Vázquez, jefa del Departamento de Endocrinología y Nutrición del Hospital Universitario Infanta Elena y por Dra. Teresa Montoya Álvarez, jefa del Servicio de Endocrinología y Nutrición del mismo centro hospitalario
La obesidad es la nueva epidemia de este siglo XXI y, por desgracia, está apareciendo a edades más tempranas. ¿Esto por qué? A juicio de los expertos responde a una evolución estrechamente vinculada con el estilo de vida actual, de forma que las generaciones jóvenes presentan un mayor peso desde la infancia y la adolescencia, reflejo de un entorno cada vez más obesogénico y de hábitos menos saludables.
Y es que no hay que olvidar que la obesidad es un factor de riesgo determinante en el desarrollo de enfermedades crónicas como la diabetes tipo 2, la hipertensión, las patologías cardiovasculares, y al menos 13 tipos de cáncer.
En el caso concreto de las mujeres, además, su impacto es especialmente relevante en la aparición de cáncer de mama tras la menopausia; mientras que en los hombres aumenta el riesgo de cáncer de colon. Asimismo, esta patología reduce significativamente la esperanza de vida, y multiplica las hospitalizaciones, las visitas a Urgencias, y el consumo de medicamentos.
La obesidad comienza a los 20 años
Precisamente, un estudio que hemos elaborado en el Hospital público Universitario Infanta Elena de Valdemoro revela que la obesidad en menores de 50 años comienza, de promedio, a los 20 años, lo que supone un adelanto de una década respecto a las generaciones anteriores y evidencia el impacto de los cambios en el estilo de vida; una preocupante tendencia en la evolución de esta patología: un alarmante adelanto en la edad de inicio de la obesidad
Concretamente, las generaciones más jóvenes comienzan a desarrollar esta enfermedad a los 20 años, en promedio, una década antes que las anteriores. Y, aunque estos hallazgos están aún pendientes de publicación, sí muestran que el peso máximo también se alcanza cada vez más temprano.
De hecho, si en generaciones pasadas ese pico solía registrarse entre los 54 y 55 años, ahora se sitúa entre los 36 y 40 años; un cambio de tendencia que, sin duda, refuerza la necesidad de implementar medidas preventivas, así como estrategias de intervención desde edades muy tempranas.
Cómo actuar
Frente a esta alarmante tendencia, insistimos en la importancia de promover entornos más saludables, así como educar desde edades tempranas para frenar el avance de una enfermedad que ya supone una de las mayores amenazas para la salud pública.
Así, y con el fin de hacer frente a esta problemática, el Infanta Elena ha implementado un Programa de Atención Multidisciplinar para el diagnóstico y tratamiento de la obesidad, que favorece una evaluación integral de cada paciente, considerando factores metabólicos, genéticos, y de estilo de vida; todo ello con el objetivo de proporcionar un tratamiento personalizado y eficaz.
Se trata, además, de un programa que utiliza tecnología avanzada y evaluación clínica, para ofrecer un diagnóstico preciso de la obesidad en una sola consulta. Mediante algoritmos analiza los riesgos individuales de cada paciente, lo que permite diseñar un tratamiento personalizado desde el primer momento.
A su vez, incluye un componente educativo clave, orientado a que los pacientes aprendan a gestionar su enfermedad de forma autónoma: El objetivo es no sólo lograr una pérdida de peso, sino fomentar hábitos saludables a largo plazo que mejoren su calidad de vida.
Con esta iniciativa, el Hospital Universitario Infanta Elena reafirma su compromiso en la lucha contra la obesidad, ofreciendo una atención individualizada y de vanguardia que no sólo busca tratar la enfermedad, sino también prevenir su progresión y reducir su impacto en la salud pública.