El primo de Almeida admite que habló dos veces con el comisionista Medina para facilitarte el negocio
Carlos Martínez-Almeida intervino para que el correo del aristócrata Luis Medina fuera atendido correctamente en el consistorio.

Madrid--Actualizado a
La intervención de Carlos Martínez-Almeida, primo del alcalde Madrid, José Luis Martínez-Almeida, fue crucial para que el pelotazo de Alberto Luceño y Luis Medina se materializara a costa de las arcas públicas madrileñas. Y este martes, la declaración del primo de Almeida en el juicio por el caso Mascarillas ha dejado en evidencia la influencia de la que se valió el aristócrata Medina para ofrecer su negocio al consistorio.
Carlos Martínez-Almeida habló en dos ocasiones con Luis Medina, según ha declarado, tras acceder a la petición de ayuda de su amiga María Díaz de la Cebosa, directora de The College for International Studies, centro donde había estudiado Medina, hijo de Nati Abascal y del difunto duque de Feria. Díaz de la Cebosa le pidió que le facilitara algún "canal o medio" para que el aristócrata hiciera llegar su oferta para conseguir mascarillas al Ayuntamiento de Madrid.
Y entonces el primo de Almeida llamó a su también amiga Matilde García Duarte, por entonces coordinadora general del Ayuntamiento de Madrid, según ha reiterado este martes, y ella le facilitó un correo electrónico de la alcaldía.
La primera llamada que recibió el primo de Almeida de Luis Medina fue para explicarle que tenía experiencia en el negocio textil con China. "Fue una conversación breve", ha dicho Carlos Martínez-Almeida, que ha negado que hablaran de si el negocio de las mascarillas en aquel momento inicial, recién estrenada la pandemia, fuera altruista u oneroso.
Días después, Medina volvió a llamarle, según ha referido el primo del alcalde de Madrid, para decirle que no obtenía respuesta a su correo enviado a la dirección electrónica de la alcaldía. Y lejos de quedarse quieto, Carlos Martínez-Almeida actuó. "Vuelvo a llamar a Matilde García Duarte y le pregunto si el correo era correcto", ha admitido únicamente.
Pero, al parecer, esa llamada tuvo su efecto, ya que tras ella el engranaje para que el comisionista Medina pudiera ofrecer sus servicios al Consistorio se puso en marcha, con la intervención de Elena Collado, jefa de compras del Ayuntamiento.
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